Carrilleras de ternera al vino | Invierno, tiempo de guisos

Esta semana, nos toca guisar Carrilleras de ternera, algo de cocina tradicional para disfrutar en familia.

Del libro de Ferrán Adriá “La cocina de la Familia”, os traemos este plato tan delicioso.
¡Vamos a allá!

Originalmente, en la receta original las carrilleras están hechas con vino tinto. Pero por experiencia, las salsas de vino tinto son un poco difíciles para los niños… y como en Casa Gutier queremos que dusfruteís ‘en familia’, hemos pensado que mejor usar vino blanco. El resultado… salta a la vista. ¡¡Una delicia!!

Las carrilleras de ternera ‘de Casa Gutier’ se deshacen.

Y la salsa, para mojar pan hasta decir basta. Un platazo, bien fácil y muy sabroso.


INGREDIENTES (para 4 personas)

4 carrilleras de ternera ‘Casa Gutier’
1/2 litro de vino blanco
70 ml de brandy
Aprox. 2 cucharadas de mostaza “con grano o a la antigua”
2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
2 cucharas de azúcar moreno
1 litro de agua
Sal & Pimienta


ELABORACIÓN

En primer lugar, nos aseguraremos primero de que las carrilleras están bien limpias de telillas (lo mejor es que os lo hagan en la carnicería. Ya sabeís que en Casa Gutier ternemos unos cuantos carniceros de primera que estarán encantados de ayudaros…). Salpimentamos las carrilleras y las doramos en la olla a presión con las dos cucharadas de aceite. Añadimos entonces el brandy y lo dejamos reducir. Incorporamos el vino y el azúcar y lo dejamos reducir también, unos 5 minutos.

Carrilleras de Ternera Casa GutierDespues, echamos entonces la mostaza y el agua. Tapamos la olla y dejamos cocer a fuego medio durante 45 minutos. Transcurrido ese tiempo,  abrimos la olla y dejamos reducir el jugo (que inicialmente será bastante líquido) hasta obtener textura de salsa espesa. Una opción, si hay peques en la familia es sacar las carrilleras y triturar la salsa para que los niños no puedan quejarse, y solo disfruten…

Y por último, como guarnición, Ferran acompaña las carrilleras con puré de patatas, pero a nosotros se nos ocurren bastantes posibilidades… desde las tradicionales patatas fritas ‘en daditos’, hasta alguna guarnición más moderna como quinoa o algún otro cereal… Ahí, os dejamos libertad para innovar, o ser tradicionales como la receta.

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